La capital del Alto Vinalopó es una localidad con mucha historia y un entorno monumental que no puedes perderte. Entre sus principales atractivos está el imponente castillo de la Atalaya y el Tesoro de Villena. Bajo esta fortaleza de origen árabe se extiende el casco urbano, de modo que constituye un lugar desde el que tener unas vistas estratégicas. Se trata de un castillo con doble muralla y donde poder ver de cerca grafitos de época musulmana, puedes conocerlo a través de una visita guiada. El castillo es uno de los puntos más fotografiados por los visitantes.
También es muy recomendable dar un buen paseo por el casco histórico de la ciudad y detenerte a disfrutar de su Plaza Mayor o apuntarte a una ruta que te muestre su patrimonio modernista. Así podrás fotografiar edificios que pueden pasar desapercibidos. Aún así, realizar un recorrido por la ciudad significa encontrar lugares como las iglesias de Santiago y Santa María, el Teatro Chapí, el Museo del Festero o el Museo del Escultor Navarro Santafé, reconocido artista de obras animalísticas, tales como el «Oso y el Madroño» de la Puerta del Sol de Madrid.