Segorbe: una ciudad con mucho por descubrir

Segorbe, en el corazón del Alto Palancia, tiene muchos encantos por descubrir que la convierten en un destino de interior ineludible

Segorbe, en el corazón del Alto Palancia, tiene muchos encantos por descubrir que la convierten en un destino de interior ineludible. Auténticos tesoros llenos de historia, enclaves naturales excepcionales, un sinfín de museos, fiestas de interés turístico internacional…Ya sea una escapada en pareja, un viaje en familia o un fin de semana con amigos… ¡Segorbe te espera! El lugar que llevarás dentro para siempre. En cuanto a museos y centros de intepretación, Segorbe en la actualidad cuenta con siete museos y centros de interpretación donde el turista puede conocer la historia, cultura y tradición de la ciudad. El “Museo Municipal de Arqueología y Etnología”; El Museo catedralicio; El Centro de Interpretación Criptas de la Catedral; Museo del Aceite; Centro de Interpretación Torres de Segorbe; Centro de Interpretación Personajes Ilustres Segorbinos, In Memoriam; Centro de Interpretación de la Entrada de Toros y Caballos.

Además, Segorbe ofrece numerosas posibilidades en cuanto a patrimonio religioso, con nueve templos entre los que se encuentra la S.I. Catedral Basílica. También destacable su conjunto monumental, digno de visitar y de cuya historia, cultura y tradición disfrutar. Además, fue declarado Bien de Interés Cultural por el Gobierno Valenciano en el 2005. Destacamos la Muralla, Acueducto y Torres Medievales. Calles serpenteantes encerradas antiguamente por un recinto fortificado, nos transmiten la calma y sosiego de una ciudad musulmana. Desde lo Alto del Cerro de Sopeña, donde antiguamente era el enclave del Castillo de la Estrella, podemos disfrutar de unas vistas espléndidas de la Vega del río Palancia y de la Sierra Espadán.

Las murallas medievales, con una longitud próxima a un kilómetro partían desde el castillo. Los restos arqueológicos más antiguos sitúan la existencia de un recinto amurallado anterior al s.XI. La muralla que se conserva pertenece al trazado que existió en el s.XIV, y la podemos contemplar en la calle del Argén, donde encontramos el alfiz que enmarca los arcos del Portal del Argén, datados en el s.XI.

El Fuerte de la Estrella está situado en la cumbre del cerro de Sopeña. Las torres y muros que hoy en día se pueden ver, corresponden a la fortificación llevada a cabo entre 1875 y 1876, con motivo de la II Guerra Carlistas. Construido sobre las ruinas del antiguo Castillo-Alcázar que fue residencia de los reyes de Aragón y de los señores y duques de Segorbe hasta su derribo a mediados del siglo XVIII para utilizar sus materiales en otras construcciones. En su interior se conservan las excavaciones arqueológicas realizadas en la cima a lo largo de los años, que facilitan una interesante visión de las ruinas del palacio y de otras dependencias integradas en el castillo medieval, cuya ocupación se prolonga sin interrupción desde la Edad del Bronce hasta la época romana. Por otro lado, conocer de primera mano cómo vivían y evolucionó el ser humano en la comarca del Alto Palancia es posible gracias a la amplia oferta cultural que los museos de Segorbe tratan de conservan con mimo y cariño. Conocer cómo desde hace 7000 años el olivo es sustento fundamental de nuestra sociedad, pasando por los diferentes centros de interpretación que nos aproximan a aquellas épocas con piezas de enorme valor patrimonial.

En cuanto a centros de interpretación y museos, la Catedral Basílica de Santa María de Segorbe es un conjunto artístico formado por el Templo, la Torre Campanario, el Claustro y el Museo Catedralicio. El apacible Claustro gótico invita a la meditación, construido entre los siglos XIII y XIV, destaca su planta trapezoidal forzada por su proximidad a la muralla. A su alrededor aún conserva siete de las capillas originales, y el Museo Catedralicio está considerado como uno de los más importantes en arte sacro de la Comunidad Valenciana.

El Centro de Interpretación Torres de Segorbe ocupa el espacio de dos de sus elementos defensivos más emblemáticos, la Torre de la Cárcel encargada de defender la puerta de Teruel y la Torre del Verdugo o Botxi, ambas construidas en el siglo XIV. En este escenario cargado de historia se describe al visitante el cambio desde los primeros asentamientos hasta la imponente ciudad amurallada medieval mostrando la Villa en esta época de convivencia entre musulmanes y cristianos. En las sobrias salas de la torres conoceremos algunos de sus personajes más emblemáticos «Sayyid» Abú Zaid, Maria de Luna o el Infante Fortuna.

El Centro de Interpretación de la Entrada de Toros y Caballos de Segorbe convierte la visita en una experiencia única, un espacio en el que descubrir y “vivir” este imponente espectáculo, declarado Fiesta de Interés Turístico Internacional.